acrílico RMRF
Desde mi ventana todo es silencio
ni una persona
ni un coche
solo el canto de algún pájaro.
La primavera se hace notar
en las ramas de los árboles
y en sus flores
en el color del día
y en la fuerza del sol.
En una rama dos palomas se arrullan
una urraca busca algo brillante
mientras grazna
desesperadamente
un grupo de cotorras verdes
escandalizan el vecindario
volando de un lado a otro.
Un perro pasea solo
sin saber a dónde dirigirse.
La vida transcurre tras las ventanas
que solo se abren a las veinte horas
para ofrecer un aplauso
y yo veo pasar tres meses de mi vida
confinada tras ellas.
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